Aquel que medita guarda silencio
para escuchar la voz del Amor.
Cierra su ojos para mirar
por dentro la luz interior.
Más allá de las imagenes externas
y los sonidos del exterior
se encuentra la Sabiduría Interna.
Pero no por siempre esto tendrá que ser así.
Algún día la luz del Amor
florecerá por doquier ,
iluminándolo todo y a su vez
será una musica maravillosa
que a su vez llenará todos los espacios.
Aquel que medita añora la eternidad
pero no porque quiere huir del mundo
sino que quiere que el mundo
llegue alguna vez a ser luz y camino de eternidad.
...
Pintura y Escrito:
Oscar Basurto Carbonell